El jueves 29 de mayo, en la Unidad Académica de General Madariaga (Av. Buenos Aires 684), se llevará a cabo la presentación de Atlas Cae, libro de Abril Gofin (27), estudiante del profesorado de Educación Física en el Instituto 169. El evento, que comenzará a las 18:30, incluirá un conversatorio con invitados y la posibilidad de adquirir ejemplares del libro, cuya portada fue ilustrada por Luciana Gómez, estudiante del profesorado de Artes Visuales en la Escuela de Arte Nº1. Gómez también expondrá algunas de sus obras durante el encuentro.
En diálogo con EL MENSAJERO, Abril compartió cómo se siente a pocos días de esta importante fecha:
¿Cómo te sentís a pocos días de presentar tu libro Atlas Cae en un evento de magnitud?
'Es un poco contradictorio. Siento los nervios de ser el centro de atención, sabiendo que muchas personas vienen de distintos lugares especialmente para este evento. Me dan ganas de decirles 'no hace falta, no es para tanto'. Me cuesta imaginar las dimensiones del evento y entender su verdadera importancia, por eso me estoy preparando para la impresión que me va a dar cuando lo vea hecho realidad. Al mismo tiempo, lo siento como cualquier otro evento del instituto: la educación pública siempre se está moviendo y todes estamos haciendo algo importante. Así que espero este evento con el mismo entusiasmo de siempre.'
¿Qué significó para vos poder plasmar tu historia en un libro? ¿Sentís que te transformó de alguna manera este proceso?
'Definitivamente. Me dio la posibilidad de explorar el pasado desde otro punto de vista. Los recuerdos que traje a la superficie para escribir el libro me ayudaron a entender el origen y las razones de algunas cuestiones con las que convivo ahora y a reconocer los cambios que estuve atravesando. Después de compartir la historia, descubrí que muchas personas que superficialmente pueden parecer diferentes a mí viven y sienten de la misma forma. Encontrar esos puntos en común me hizo sentir menos solo y espero que quienes lean el libro encuentren esa misma compañía.'
Sabemos que docentes y otros estudiantes colaboraron en la creación del libro, como en la ilustración de la portada y los señaladores. ¿Cómo fue trabajar en equipo para hacer realidad este proyecto?
'Fue la única forma posible. Desde el principio, el libro no surgió como una idea mía, sino a partir de la propuesta de la profe del taller de educación corporal. La escritura de las autobiografías fue un proceso individual, privado y muy contenido, pero la necesidad de buscar comunidad fue lo que me llevó a compartir la historia con la profe de Didáctica General. Fue pensar “es posible que esta persona entienda lo que quise decir” y arriesgarme. La vida es mía y la historia la escribí yo, pero 'Atlas cae' existe porque fuimos capaces de mirar alrededor con ganas de conocernos y conectarnos. Este proceso no empieza ni termina con la presentación del libro, sino que sucede cada vez que alguien lo lee y siente algo.'
Mirando hacia el futuro, ¿Te gustaría seguir escribiendo? ¿Hay otros proyectos literarios en tu horizonte?
'Escribo todo el tiempo. No puedo evitarlo. 'Atlas cae' es mi proyecto más íntimo y la primera vez que me convierto en personaje, pero no es la primera vez que escribo un libro.
Eso sí, mis otras historias son muy distintas a esta, mucho más livianas. Escribo lo que me divierte y lo que me da ternura, y todos mis personajes coinciden en su identidad LGBT+. En la vida, las cosas lindas suelen perderse entre todas las demás. Nos toca experimentarlas como algo aislado, excepciones. A mí me gusta rescatarlas y escribirlas, así puedo verlas todas juntas.
Muchos de los personajes LGBT+ en la literatura la pasan mal, con la idea de reflejar los desafíos reales que la comunidad ha enfrentado históricamente y continúan hasta hoy. Estoy de acuerdo: hay que usar las plataformas que tengamos disponibles para visibilizar, registrar, reclamar. Pero para muchas personas el arte es un refugio y sería una lástima olvidar que también podemos usarla para jugar, para inventar, para crear una realidad en la que las cosas son como nosotres queremos.
No tengo planes de publicar mis historias en formato físico, pero andan dando vueltas por ahí bajo seudónimo. Buena suerte.
Ah, algo que sí quiero hacer es llevarlas al cine. Regálenme un contrato con Netflix para Navidad'.