El fuerte temporal de agua y viento que comenzó a regir en nuestra región desde el domingo y que continuó ayer con más ráfagas de viento, dejó secuelas en la ciudad que ya tiene manos a la obra. En consecuencia de la fuerte caída de agua, que contabilizó 100 mm de agua en pocas horas, la arena que sostenía el pasaje costero en la intersección con
Paseo 110 cedió, dejando ese sector de la rambla con peligro de derrumbe. La secretaría de Obras y Servicios Públicos, a cargo de Pedro Iannuzzi, ha tomado medidas inmediatas ante los efectos del fuerte temporal en el lugar
Por precaución y seguridad, se ha procedido al vallado completo de la zona afectada. Se solicita a la población evitar circular en ese sector hasta nuevo aviso. Una vez que cese el temporal, se realizarán las labores de reparación correspondientes en la rambla para restablecer la normalidad en la zona afectada. Al mismo tiempo, en la intersección de 105 y playa, aunque la rambla no se ha desmoronado, se ha decidido perimetrar la zona por precaución y se insta a no circular en esa área por el momento.