Pinamar (por Sergio Michnowicz).- Sobre la Avenida Bunge, al lado de la Feria Artesanal, se encuentra el Nodo Sustentable, un gran globo con mucha información sobre cómo ayudar al planeta y a nuestra comunidad en particular con el reciclado de plásticos, cartón, vidrio, metales, con la idea de entretener educando a los más chicos y despertar la conciencia en los adultos.
Detalles
Guadalupe Oliverio tiene a su cargo la divulgación de todo aquello que genera la Cooperativa de Trabajo “Reciclando Conciencia”, la entidad que creó el nodo. “Tenemos este espacio donde hacemos actividades todos los fines de semana para niños y para adultos, Nuestra idea es que este sea un espacio de educación ambiental, pero también un espacio con talleres de oficio. Por ejemplo, este fin de semana va a venir una artesana joyera, que nos va a enseñar a hacer distintos aros, collares y demás con materiales reciclados. Hace unos días vino otro artista de Pinamar, donde los niños podían pintar carteles que estamos yendo a pegar a la playa.”
“Nuestra idea es intentar que la comunidad de Pinamar conozca lo que hace la cooperativa, avanzar en una reflexión acerca de los objetos que nosotros tiramos y desechamos cotidianamente, y cuál es el tratamiento que nosotros creemos que deberían tener.”
Un dato. “Hoy tenemos 40 puntos verdes en Pinamar, Valeria del Mar, Ostende y Carilóm donde los vecinos tiran cartón, papel, tetrabric, latas, que luego van a la planta que tenemos en Pinamar. Estamos en el último año recibiendo aceite y también desechos electrónicos, los celulares cuando se rompen, las computadoras y demás,”
“Nuestra idea es, una parte, volver a mandarla a la industria y otra parte intentar agregarle valor haciendo muebles y distintos productos como cestos, macetas y demás, porque nos parece bueno que una parte vuelva a la industria, son objetos que pueden ser reutilizados, y otra parte nos parece importante pensar la planificación de las ciudades, la construcción, la arquitectura cómo empieza a incorporar en este contexto elementos que de otra manera irían a basurales a cielo abierto.”
“También queremos mostrar el crecimiento de la cooperativa porque de un tiempo a esta parte ha crecido de tal forma y se ha diversificado que está bueno mostrarlo” aclaró Oliverio. “La cooperativa surge en el 2010, con un grupo de activistas ambientales que iban a las playas, al bosque, a cuidar estos bienes comunes naturales que nosotros tenemos en Pinamar, y a juntar los residuos. A partir del 2014 se conforma la cooperativa. Hoy Reciclando Conciencia emplea de manera directa e indirecta más de 70 personas, da la oportunidad a muchos jóvenes de poder trabajar, estudiar, estudiar en universidades, en terciarios, otros jóvenes que están terminando el secundario.”
“Gran parte de las decisiones de la cooperativa las toman las mujeres” afirma. “Hay un protagonismo muy fuerte de las mujeres en la cooperativa, y además de ese impacto social que genera Reciclando Conciencia hay un impacto positivo ambiental para intentar relacionarnos con el planeta de una manera un poco más armoniosa.”
La evolución que la cooperativa ha tenido es impresionante, siempre experimentando}, y esto ha hecho que hoy día sea un ejemplo en la región…
Sí, es un modelo y está bueno mostrar eso que el modelo cooperativo permite como planificar y permite la creación.
“Nosotros simplemente podríamos volver a llevar el cartón, el vidrio, el plástico de nuevo a la industria y sin embargo la cooperativa tiene la fuerza para poder crear este tipo de objetos, de muebles, estructuras para la arquitectura, para la construcción. Entonces me parece que tiene un potencial enorme. Además, es un poco el debate que están teniendo las ciudades en todo el mundo de qué hacer con los residuos. Y si Reciclando puede ser un camino a seguir, ya estamos aportando un granito de arena.”
05/04/2025