(Entrelineas- por Gabriela Urrutibehety) El juez en lo Correccional de Dolores, Jorge Martínez Mollard, condenó a tres policías a la pena de tres años de prisión en suspenso y a otros dos a dos años y seis meses, por haber sometido a un detenido a vejaciones y por falsificar actas de procedimiento para encubrirlas. Otros dos efectivos de la policía local fueron sobreseídos de los cargos que se les imputaban.

Aníbal Márquez, Sergio Garay y Gustavo Beherán fueron condenados a tres años de prisión en suspenso, por haber sido el último de ellos el autor penalmente responsable de las vejaciones a las que fue sometido Julio César Zarantonello mientras estaba detenido, esposado en el patio de la Comisaría de Dolores. Los dos primeros fueron acusados de los delitos de violación de los deberes de funcionario público, falsificación de documento público y encubrimiento. 

En el caso de Beherán, el juez consideró que “ha quedado demostrado el total desprecio con el que el nombrado imputado se dirigió hacia Zarantonello, procediendo a golpearlo sin piedad, mientras que hallaba esposado con custodia en el patio de la comisaría. Cabe concluir que el señor Beherán innecesariamente confrontó con una persona que se encontraba aprehendida por un procedimiento ajeno a su función el día de los hechos”.

Por su parte, Germán Baliani y Juan Manuel Sotelo recibieron una condena de dos años y seis meses en suspenso por los delitos de encubrimiento, violación de los deberes de funcionario público y falsificación ideológica de documento público. Los cinco también fueron condenados a cinco años de inhabilitación para ejercer cargos públicos. 

Finalmente María José Herrera y Manuel Agustín Pío Córdoba fueron sobreseídos de los cargos por los que se los juzgaban.