HOMENAJE
Pinamar (por Sergio Michnowicz).- Nunca lo vi jugar, pero por la rica historia del club Independiente me enteré que fue uno de esos tipos que ganaron decenas de copas y miles de corazones.
Dante Mírcoli fue parte clave del “Rey de Copas” que ganó todo en los 70. Nacido el 12 de marzo de 1947 en el pueblo de Ladispoli (Roma) vivió la mayor parte de su vida en la Argentina y tuvo una actividad deportiva principalmente ligada al mejor Independiente de la historia.
El Tano llegó a las inferiores del Rojo en los 60 y tuvo su debut en 1965, pero su nombre quedó grabado en la memoria de todos durante 1972. El club había conquistado por tercera vez la Copa Libertadores y Mírcoli, lateral, volante central o extremo, se había ganado un espacio a punto tal de terminar como máximo artillero del equipo en el certamen con 4 gritos junto con el legendario José Omar Pastoriza.
Además, fue protagonista de un recordado cruce con Johan Cruyff durante la ida de la final de la Copa Intercontinental que se disputó en Avellaneda en 1972 entre el Rojo y el Ajax de Países Bajos.
El holandés, aquella noche en la Doble Visera había anotado a los 6 minutos un tanto. Y un cuarto de hora más tarde sería protagonista involuntario de la acción que grabó el nombre de Mírcoli en las perlitas históricas del fútbol: “Le estoy por dar la pelota a Pepé (Santoro, el arquero). Me doy vuelta, agarro la pelota y cuando giro para dársela veo una camiseta blanca que me pasa a toda velocidad y me lleva la pelota. ¡Fium! Se me iba al arco. Entonces le tiro, y cuando le tiro le pego por acá (se señala el muslo). Cuando cae, cae contra la chapa. Yo no lo había visto, te digo la verdad. Ni sabía quién era. Cuando se levantó y vi que era Cruyff pensé “qué cagada hice acá”. Pero ni me amonestaron. En esa época no eran de sacar muchas tarjetas, pero si le pegabas al mejor de ellos…”, recordó Dante a Infobae.
Un tipo serio que al desplegar sus recuerdos llenaba de sonrisas el ambiente.
Tuve la suerte de conocerlo allá por abril de 2016. Había venido como captador de talentos al Polideportivo de Pinamar, en representación de Independiente. Y en los momentos libres intercambiamos opiniones y recuerdos.
Dentro del ambiente Rojo fue un prócer. Un tipo que se hizo de muy abajo. De familia trabajadora, siempre quiso llegar lejos para sacar adelante a los suyos. Y vaya que lo logró.
Tenía 77 años. El Tano ingresó en el portal de los mejores del mundo, junto al barba. Y seguro ya debe estar con el Pato y el Holandés charlando sobre aquellos tiempos inolvidables en donde la redonda movía las pasiones.
04/12/2024