(Por Carlos Muselli) Un huertero aficionado de Madariaga cultiva, entre otras cosas, desde hace varios años, tomates variedad "Corazón de Buey" con semillas provenientes de Italia y que tienen unas características muy interesantes que son las de tener piel fina, ser dulces, resistentes, de buen tamaño, especiales para ensaladas, y con la característica de madurar de adentro hacia afuera y quiso probar una nueva variedad. 

Habiendo visto nuestra nota publicada el 31/01/2019, en: https://diario-elmensajero.com.ar/index.php?notaid=5c5301229cfb6 trató de ubicar a Emilio Radonjich y después de varios intentos lo logró y le pidió a ver si le podía proveerle de algunas semillas de esas que cultiva él y éste le comentó que las primeras semillas fueron traídas por Basilio Yankovic de su tierra natal, Montenegro. 

Semillas que fueron durante varios años cultivadas y resembradas en Madariaga, a la vieja usanza, conservando las semillas de las más vigorosas plantas y de los mejores ejemplares de ellas. 

Don Emilio le entregó, esta primavera, un sobre conteniendo una servilleta de papel doblada en cuatro que contenía semillas diciéndole que eran de esos tomates. A pesar de que la época de hacer almácigos había pasado, hizo un almácigo con esas semillas cuyos plantines compartió con su hijo Matías y un huertero conocido de Madariaga de nombre Pablo, con resultados variables. 

Dos meses después, esa hilera de tomateras de semillas supuestamente montenegrinas dieron sus frutos, varios grandes y uno de ellos sobresalió por su tamaño. 

Ese tomate en cuestión pesaba al momento de cosecharlo 1,424 kg controlando el pesaje estaba el productor Matías Muselli junto a su padre y el secretario de Producción de Madariaga, Javier Volpatti.

Si bien no llegó al record de Emilio que fue de 1,448kg, se aproximó bastante, con apenas una diferencia de 23 gramos. Hay otros grandes también pero ya están madurando y no creen que lo supere.

"De los ya cosechados y degustados se nota un intenso sabor y especialmente el aroma a tomates "de los de antes", su aspecto es similar a los antiguos tomates platenses originales, con surcos aunque no tan pronunciados, frutos apenas achatados y muy resistentes a enfermedades", dice el huertero.

Habiéndolo consultado a Basilio, cuenta que las semillas no fueron traídas de Montenegro, como se comentó en la nota, sino de Italia por un pariente del bombero Abel Nigro quien le pasara unos plantines a él y que cosechó en su quinta.

De esos plantines guardó las semillas y el año entrante le pasó algunos plantines nuevos al amigo, coterráneo y compañero bomberil Emilio Radonjich y a otros.

Habiendo buscado en Internet, el productor encontró que al parecer se trataría de una variedad denominada "Brutus" o “Brutus Magnum” Italiana (Solanum lycopersicum, var. Brutus magnum), que produce frutos grandes y muy característicos: rojos, con nervaduras profundas, que pesan en general unos 500/800g y hasta 20 cm de diámetro. En condiciones favorables es posible cultivar tomates que pesen hasta 2 kg.

Asimismo está conservando las semillas a fin de quien quisiera cultivarlos se las solicite personalmente. Su idea es repartirlos por todo Madariaga y beneficiarnos todos por estos magníficos frutos, ya bien arraigados. La planta de este tomate saca pocos frutos por planta pero grandes, tiene piel lisa, pocas semillas y muy chicas, siendo especial para ensaladas por su riquísimo gusto, consistencia y aroma.