Una nueva crecida del mar se registró en la noche de este martes en las playas de Villa Gesell. Los fuertes vientos, que fueron intensificándose a lo largo del día, provocaron un fenómeno habitual pero preocupante: el mar mostró una actitud agresiva, que si bien resultó impactante para quienes se acercaron a ver el oleaje, deja consecuencias en la línea costera.
El avance del agua sobre la playa arrastró una gran cantidad de arena mar adentro, llegando incluso hasta la línea de los balnearios en algunas zonas. La mayor preocupación se concentra en el área céntrica, donde la presencia de edificios y construcciones hace que el impacto de estos fenómenos sea más visible y dañino. En cambio, las playas del sur y del norte, con una cadena de médanos más extensa, muestran una resistencia mayor a este tipo de eventos.
A pesar del riesgo, muchos vecinos se acercaron al muelle de pescadores para observar cómo las olas golpeaban con fuerza la estructura de cemento, desde el morro hasta la zona cercana a la rambla costera.