En el tribunal oral Nº 2 de la ciudad de Dolores, se definió en la jornada de este miércoles el juicio oral y público por el fallecimiento del joven geselino Nicolás Deanna, en noviembre del año 2017 por una meningitis mal diagnosticada.
El juicio tuvo 4 jornadas de testimonios, donde pasaron familiares, amigos de Nicolás y además los profesionales que lo atendieron en el lapso de los días que estuvo agonizando en Pinamar, hasta su deceso.
A seis años del deceso de Nicolás Deanna, el joven geselino fallecido en el Hospital de Pinamar por una meningitis mal diagnosticada, se dio por concluido el juicio contra el Dr. Ricardo Cap, que dilató el proceso con sucesivas apelaciones y recursos, el último de ellos plantear que no podía afrontar el juicio por motivos de salud, en mayo pasado.
"El imputado CAP apelo cientos de veces, perdió todas las apelaciones", señaló la madre de Nicolás, Gabriela Covelli, quien además indicó que el Tribunal Criminal N°1 de Dolores lo calificó al caso como "homicidio Culposo con una alternativa de Homicidio con dolo eventual".
Luego de cuatro jornadas, cuando estaba estipulado que fueran dos, se espera que en las próximas semanas esté la sentencia por parte de los jueces. Desde la fiscalía acompañando a la parte damnificada se solicitó una pena de 10 años de prisión y la inhabilitación definitiva para ejercer la medicina.
Un proyecto de ley nacional por esta causa
Un plenario de las comisiones de Salud; y de Legislación General del Senado dictaminó la denominada “ley Nicolás” sobre calidad sanitaria. El objetivo del proyecto, que podría ser sancionado en los próximos días en la Cámara alta, apunta a evitar diagnósticos errados y mala praxis, tras la muerte de Nicolás Deanna -a los 24 años- por una meningitis bacteriana que no fue detectada a tiempo.
En concreto, el primer artículo del texto -ya aprobado por Diputados- establece que se debe asegurar el “derecho a una asistencia sanitaria de calidad y segura, centrada en las personas y en las comunidades, a través de la definición de un marco jurídico e institucional que promueva la transformación de las pautas culturales, la mejora de las condiciones de la práctica sanitaria, la incorporación de herramientas tecnológicas adecuadas, la disminución de daños evitables, y el cuidado del marco de trabajo del equipo de salud”.
Por otra parte, en su artículo 18, la iniciativa plantea que “a fin de garantizar condiciones de equidad y calidad en la atención sanitaria, es obligatoria la verificación de la aptitud profesional del equipo de salud”. En tanto, en el 19 se especifica las que requieran “la valoración de una destreza técnica”, se tendrán que “incorporar mecanismos de simulación”.
Seguido a ello, la comisión de Salud escuchó, entre otros, a la coordinadora de la Unidad de Recuperación Cardiovascular Pediátrica del hospital Garrahan, María Althabe, quien sostuvo que “el modelo de atención” de la reconocida institución “corre riesgos en el escenario actual”.