Ayer se conmemoró en Argentina el Día del Boxeador, en homenaje a aquella fenomenal pelea que Luis Ángel Firpo hizo en Nueva York ante el poderoso Jack Dempsey el 14 de septiembre de 1923.

Por tal motivo, EL MENSAJERO dialogó dos expertos en el tema, Fiorella Salvarezza y Diego Pereyra, quienes además de practicar el deporte, también lo enseñan.

“En el año 2001 o 2002, un amigo de trabajo me invitó a ir a boxeo con él y ahí fue mi primera experiencia con el boxeo”, relata Diego, que comenzó a dar clases en Madariaga en 2014, sobre sus inicios en el deporte.
Y agregó: “Más allá de ser un deporte, es un estilo de vida. Para mí, el boxeo es el reflejo mismo de la vida. Donde uno aprende el significado de palabras tan importantes como la disciplina, constancia, trabajo a corto, mediano y largo plazo, compañerismo, humildad y otras tantas”.

Fiorella, por su parte, lo empezó a practicar hace cuatro años, y a dar clases hace poco más de dos. “Lo elegí por curiosidad”, aseguró. Y detalló que “Boxeo tiene en su entrenamiento muchos beneficios para la salud física, como así también genera disciplina, refuerza la seguridad en uno mismo, forja el carácter y aumenta la autoestima”.

El deporte en tiempos de pandemia
Tal como ocurrió con otros deportes, el boxeo debió adaptarse a los protocolos y medidas establecidos por la pandemia de Coronavirus
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Al ingresar, es obligatorio que cada alumno lo haga con las vendas y tapaboca ya colocado; también deben dejar asentados sus datos en una planilla (nombre y apellido, firma, fecha, hora y si mantuvo contacto con algún caso positivo de Coronavirus); y al finalizar cada ejercicio, desinfectar los materiales utilizados con alcohol.

“Con la pandemia tuvimos que cerrar nuestras puertas un largo tiempo. Cuando habilitaron la actividad, nos adaptamos a la capacidad según los m² de nuestro club y tomamos todas las medidas que nos requería el protocolo”, comentó Fiorella.

Mientras que Diego, remarcó que “hoy todo es más acotado en tiempos. Más intenso porque no permite el tiempo de óseo, y limitado en cuestiones técnicas por respetar el protocolo a seguir”. Y agregó: “Fue un proceso que no costó tanto y día a día se aprende a convivir con este momento”.

Consultados sobre cuántas personas practican el deporte actualmente, revelaron que “están yendo a entrenar ocho personas por turno. En seis turnos en total por día. Antes de la pandemia había turnos de aproximadamente veinte personas”.

Para los interesados, las clases se dictan los días lunes, miércoles y viernes, en el Club Huracán, ubicado en calle Avellaneda casi Moreno. (Consultar por horarios disponibles).

- ¿Todas las personas que van a entrenar lo hacen con el objetivo de competir?
DP: Muchos arrancan por lo físico y después les agarra el gustito por subirse al ring a practicar con algún compañero. Y luego quedan los que se deciden subirse al ring para competir.

FS: No, la mayoría lo hace con fin recreativo y beneficioso para la salud.

Con respecto al entrenamiento, explicaron que “se organiza de la siguiente manera: calentamiento; abdominales; circuitos físicos; técnica de boxeo en bolsas y estiramientos. En este momento, estamos haciendo entrenamientos que integran la fuerza física a través de entrenamientos funcionales y circuitos, como así también técnica y movilidad sobre nuestra disciplina”.

Por último, Diego invitó a la gente a que "se anime a ingresar a un club de boxeo y a practicar este deporte. El boxeo transforma vidas en todo sentido. En todos estos años he visto mucha gente cambiar su vida 360°. Y siempre para bien. Un chico en un gimnasio, es menos tiempo en la calle”.

En tanto que Fiorella lo definió como "un arte noble que nos enseña más de lo que podemos percibir a simple vista".

"Además de los beneficios ya mencionados, en nuestro club aprendemos en un ambiente donde predomina el compañerismo y la auto superación. Los invito a todos los interesados a animarse a conocer este hermoso deporte”, concluyó.